Fuente: ESO News
Utilizando el VLT de la ESO, un equipo internacional de astrónomos ha podido estudiar el recién creado disco de materia alrededor de una estrella joven que está en las etapas iniciales de construcción de un sistema planetario. Por primera vez un compañero más pequeño pudo ser detectado y podría ser el causante de la gran brecha que se ha encontrado en el disco. Próximas observaciones determinarán si este acompañante es un planeta o una enana marrón.
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Fuente: ESO |
"Estudios previos habían mostrado que T Cha era un objetivo excelente para estudiar cómo se forman los sistemas planetarios", apunta Johan Olofsson (del Max Planck Institute for Astronomy), uno de los directores de los dos artículos que se publicarán en Astronomy & Astrophysics describiendo el trabajo. "Pero esta estrella está bastante lejos y se necesitó toda la potencia del VLTI (Very Large Telescope Interferometer) para poder verlo con detalle y analizar lo que realmente estaba ocurriendo en el disco de polvo".
Los astrónomos observaron T Cha por primera vez utilizando el instrumento AMBER y el VLTI. Encontraron que parte de la materia del disco se formó en un anillo muy estrecho a sólo 20 millones de kilómetros de la estrella. Más lejos de este disco interno, encontraron una región de polvo con la parte exterior del disco ocupando regiones a unos mil millones de kilómetros de la estrella.
Nuria Huélamo (ESAC), la directora del segundo artículo retoma la historia: "Para nosotros la brecha en el disco de polvo alrededor de T Cha era la prueba del delito y nos preguntamos: ¿podríamos estar siendo testigos de un acompañante creando una brecha en el disco protoplanetario?".
Sin embargo, el hallazgo de un acompañante borroso tan cerca de la estrella es un gran reto y el equipo tuvo que usar el instrumento NACO del VLT con una técnica novedosa, llamada Sparse Aperture Masking, para conseguir su objetivo. Tras un análisis cuidadoso encontraron la clara señal de que había un objeto en la brecha del disco de polvo, a unos mil millones de kilómetros de la estrella -un poco más lejos que lo que está Júpiter del Sol. Esta es la primera vez que se detecta un objeto mucho más pequeño que una estrella en una brecha del disco de polvo de una estrella joven. La prueba sugiere que el objeto acompañante no puede ser una estrella normal y será o bien una enana marrón rodeada de polvo o un planeta de reciente formación.
Huelamo concluye: "Es un estudio sobresaliente que combina dos instrumentos de última tecnología del ESO. Próximas observaciones nos permitirán saber más sobre este acompañante y el disco, así como comprender qué mueve el disco interno".
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